domingo, 6 de noviembre de 2016

TV EN LA SALA DE ESPERA: ¿CORTÉS AMENIDAD O DISTRACTOR DEL BUEN SERVICIO?: Por: LCC Juan Carlos Guerrerosantos A. (www.triunfadoctors.blogspot.mx)      Recientemente estuve en la  sala de espera de un prestigioso neurólogo quién atiende con gran calidad y efectividad a pacientes de la tercera edad; supongo que la mayoría son enfermos de Alzheimer y otro tanto serán enfermos de Parkinson u otras condiciones propias de la edad. Todos los pacientes iban escoltados con sus respectivos acompañantes, por lo tanto la sala de espera se encontraba abarrotada. El tiempo dedicado a la consulta y la calidad humana del médico en cuestión son generosos y con excelencia, incluso sus instalaciones tienen adecuaciones en cuanto a rampas, y pasamanos especiales en todo el inmueble; facilitando el transitar con los enfermos. Como buen crítico de este tipo de servicios me llamó la atención en la sala de espera la colocación y ángulo de fijación  que posee el aparato televisor, ya que no queda claro si la intensión es que la señorita recepcionista se entretenga y pase un buen rato viendo  sus programas y novelas favoritas, a costa de su distracción, ya que si timbra el teléfono se molesta al contestarlo o cuando llega un paciente pone cara de interrupción en lugar de darnos la bienvenida. Todos pensaríamos que esta amenidad está  dirigida hacia los pacientes y sus acompañantes con el fin de que percibamos que la espera es corta.   Hoy en día es muy complicado tener esta amenidad y complacer a todos con la programación que allí se exhibe, pues con decenas de canales disponibles y gustos variados no podríamos definir el contenido preciso de un aparato televisivo que le diera gusto a todos, sin embargo si es posible el tener un quinteto de opciones en cuanto a contenidos probables que si bien no consistirían en ser tu serie favorita, si pueden lograr el objetivo de pasar el rato o entretener a los visitantes. Sugiero no sintonizar contenidos que implican continuidad, como son novelas o programas secuenciales, ya que para poder disfrutar de estos debes de conocer la trama y a los personajes, y si nunca en tu vida lo has visto,  no será atractivo verlos. Tampoco sugiero contenidos médicos, sangrientos o de emergencias, ya que estos podrán alterar la paz de los pacientes. El mejor tipo de contenidos son documentales, programas neutros como son los culturales o turísticos, o bien los dibujos animados son contenidos que yo disfruto mucho en los aviones a pesar de no tener los audífonos puestos, esto me da la idea que pueden ser vistos por niños, adultos mayores con problemas en sus sentidos, o para cualquiera que quiera matar el tiempo. Normalmente la población joven ya no necesita al televisor, pues poseen los teléfonos inteligentes o pantallas personales, sin embargo hay personas que olvidaron sus equipos o no traen batería suficiente y hay que proporcionarles un pasatiempo.  Por último sugiero ser muy claros y enfáticos con el personal para que no se distraigan, ya que si el contenido televisivo es relevante para ellos(as), dejarán de hacer su trabajo y de atender con esmero a los pacientes por estar atentos a la “caja de los monitos” que no hace otra cosa que mesmerizarles y repercutir negativamente en el la calidad del servicio de nuestras áreas y personal de atención al público. @triunfadoctors info@quirutex.com